dilluns, 2 d’agost del 2010

JLG, dietista en la sombra

Celoso de su intimidad, ocultando su verdadera identidad tras esa máscara indiscutible de aviador del siglo antepasado o de nadador olímpico del presente, JLG es, desde hace un tiempo, mi dietista personal y entrenador compartido. Tras el pajarón del 1 de agostoquema, el que esto suscribe comienza a tener, sin embargo, serias dudas -de las apellidadas ontológicas- sobre sus métodos dietéticos. Para el que en la nube de la memoria no acabe de despejar lo de la duda ontológica, le pondré un ejemplo que espero le tranquilice. La comida del 1 de agostoquema fue, como podréis suponer, muy triste. Mi mujer, queriendo distrarme, aprovechó la aparición televisiva de Jennifer López para intentar animarme. Gracias, cariño, desde aquí. Cosas así, unen a los matrimonios. "Te das cuenta, me dijo, de perfil tiene un culo inconfundible". Y de cara también, pensé yo con la velocidad del rayo que, según qué temas, nunca cesa. Pero callé; para contestarle, como quien no quiere la cosa: "y de cara es una contradicción". Quedé bien, creo, por la calculada frialdad demostrada. Pero, expuse, sin pretenderlo, una duda ontológica. Un culo de cara, admitámoslo, es un no-culo. O dicho de otra manera, la cara de un culo es un no-ser. Esa noche no puede conciliar el sueño, era de esperar. Y ya que estamos en agostoquema, y que por tanto el bochorno aprieta, considero que es el mejor momento para escribir un ensayo sobre el tema, que pienso titular: Para una ontología esencial de las no-témporas: revisión metaterminal del nalgar jenniferlopeziano, o algo por el estilo. Bueno, volviendo al tema. Como podéis comprobar en la siguiente instantánea, de no estar trucada, JLG consigue mediante sus estratégias -que podemos resumir con la siguiente máxima: bocata antes, durante y después del pedaleo- coronar elevaciones tan respetables como el Cabigordo, 1600 m. Con pruebas tan contundentes, pocos pueden poner en duda sus principios. Pero ahí están el 1 de agostoquema y la duda ontológica, claro. JLG, que teme le denuncien por intrusismo (temor que ni comparto ni comprendo, ya que profesionalmente es saxofonista de jazz) calcula que es necesaria una media de 3 -de los bocata mundi que al final del post encontraréis, algunos con doble ración porcina como suplemento vitamínico- para realizar una etapa llana de unos 75-80 km. De encontrarnos puertacos tremendos en la ruta, como Oronet & Cia., elevaremos la cantidad en 1 unidad o 1 y 1/2. De aquí, que la razón por la que aplazo sine die mi participación en la Quebranta es, consecuentemente, de orden logístico. ¿Cómo transporto en el maillot de 12 a 15 de los susodichos bocata mundi, los sendos -qué palabra, por dios- litros de cerveza fría en no sé cuántos bidones térmicos y los imprescindibles cafés del tiempo en flags caseros dentro de bolsas para congelados?... Hoy por hoy, imposible. Pero no pierdo la esperanza viciclista de hacer tan magna salvajada, la Quebranta, claro... ¿he dicho estupidez? perdón, quería decir hazaña. Sobre todo, si cambio de dietista personal y entrenador compartido, o no. He ahí, queridos amigos, el dilema. That is the question.



Ah!, se me olvidaba: propuesta de hidratación jotaelegiana

1 comentari:

  1. Yo también me comeria unos bocatas como los de J.L.G, pero como no tengo bicicleta de carretera, pues no es lo mismo comerselo en casa.¡Que pena!.

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